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jueves, 28 de febrero de 2013

LAS "CHICHAS", GASEOSAS

Saludos y en esta oportunidad haré un escrito alusivo a las bebidas gaseosas, a las que llamo "chichas" para burlarme de lo inofensivas que son para mí.

Cotidianamente y desde hace varios años gusto de beber aguas gaseosas para calmar no sólo la gran sed que me da después de comer, cuando como sin beber a la vez, sino que se ha convertido en una forma de calmar mis fuertes ímpetus sexuales con respecto de la necesidad que tengo de sexo oral con las mujeres, me distrae y ayuda a disipar el constante pensar en realizaciones del acto sexual.

Para mí beber gaseosa me permite hacer los intestinos y el aliento al modo de la consecuencia de cuando le lamo la cosa a una mujer, y si ella huele a fuerte a orines y a efluvios diversos tales la menstruación, es lo más elevado de la existencia de un hombre.

La gaseosa y sus "bolitas", como yo le digo a las unidades de gas que allí hay, se disfruta mejor en estado frío, mientras más fría la gaseosa, mayor disfrute al beberla. Las burbujas de gas allí, más los saborizantes son las que definen cuando al beberla se hallará el pleno desfrute. En las "bolitas" de gas se encuentra el verdadero disfrute por la gaseosa, el sabor es importante, de hecho, para mí que bebo en cantidades altas la gaseosa, los tintes y saborizantes deben ser de alta calidad para no estropear los resultados, ya que si el tinte y saborizantes del agua son de mala calidad, los malestares en el aliento, la tráquea y la saliba serán una realidad que fastidie. A mí me pasa de ese modo, es soy un bebedor empedernido de gaseosas.

Me gusta beberlas acompañadas de chocolates y otros dulces, más cigarro para sopesar los sabores. De hecho, todo ese conjunto formado por el chocolate, la gaseosa helada y el cigarro, al mismo tiempo, me causa un disfrute que va más allá de sentirme acompañado, me da estado de alegría duradera por hallar la analogía de una satisfacción sexual, es todo un morbo por los resultados a la hora de beber el agua gasificada y por lo que queda en la boca e intestinos, y de paso calma la sed.

Ayer en el trabajo me tomé tres litros de "chicha" "Inca Kola", dos botellas bien heladas de litro y medio cada una, a la par me fumé unos cuantos Pall Mall azul. He sentido en mi turno de amanecida una gran satisfacción que hizo las horas de la madrugada transcurrir con agrado.

De mis experiencias con las gaseosas que bebo en hartas cantidades, lo cual no recomiendo a cualquier persona, puesto que si bien es cierto soy un individuo muy, pero muy saludable y casi nada me hace daño, a cualquier otro, mujer ú hombre, le podría causar serios problemas de salud el beber cotidianamente gaseosas en cantidades altas. Personalmente, las consumo desde 1994 en niveles altos, siendo alrededor de tres a cuatro litros diarios de gaseosa las mayores cantidades diarias que he bebido, mas, la mayoría de veces sólo consumo entre uno a tres litros diarios.

Como decía, de las experiencias bebiendo gaseosas en hartas cantidades todos esos años pasados, me tomo la autoridad para hablar sobre el asunto y sobre marcas y sabores ya que he podido conocer del tema con autoridad.

La gaseosa más rica del mundo, la más deliciosa que he probado es la "Hit" de sabor uva, gaseosa de Venezuela, helada es una gran y refrescante bebida, de hecho he comprobado que los venezolanos son los más especialistas de la región de América del sur en preparar bebidas refrescantes y deliciosas, será por el clima caluroso de allá que provoca beber y calmar la mucha sed, y allá hay que calmarla con clase internacional. He probado deliciosas mezclas de ponches y otras mezcolanzas con frutas, bebidas que son muy deliciosas y refrescan grandemente.

La más asquerosa basura en gaseosas, como yo le digo así, "asquerosa basura" que hay en gaseosas es la "Kola Real" peruana, llamada en otros países "Big". La de color negro es en extremo dañina para la salud, así como también las de otros colores ya que los tintes y saborizantes que utilizan en esa marca son de mala calidad, la empresa barata se ha ahorrado al máximo en costos para hacer una fórmula, así, barata y nociva para la salud, eso ya está comprobado. De hecho el mayor desagrado que he tenido en mi vida con respecto al consumo de gaseosas, ha sido bebiendo una botella de 3.5 litros de gaseosa "Kola Real", en el año 2002, allí quedé de muy mal aliento y con malestar fuerte de estómago, la tráquea como si hubiese sido expuesta a algo así como polvo de extintor contra incendios, mis heces fueron con pigmentos y mucosidad color negro, nunca me había pasado, fue por consumir esa marca de gaseosa y casi de una sola como me gusta a mí extremarme, en cantidad de 3.5 litros, como digo. Los mismos resultados nocivos ocurren en consecuencias y lentamente si se consume esa marca de a pocos. La verdad y como conocedor del asunto, recomiendo a todas las personas de América y de otros lugares que no consuman la gaseosa "Kola Real", o la llamada "Big" en otros países fuera del Perú, a la larga puede ocasionar incluso cáncer. De hecho, todos los productos de esa embotelladora son una real cochinada barata y maligna.

La "Coca Cola" es una gaseosa que no daña a tintura los intestinos, no ocurre así con gaseosas baratas como la "Big", "Kola Real", "Oro" y otras. La gaseosa estadounidense es conocida más bien como una buena bebida gástrica.

Del Perú debo destacar la marca "Perú Kola", esa gaseosa tiene una fórmula de sabor agradable, tal y como si uno tomase "Coca Cola" y a la vez comiese pan, contiene una sustancia que según se deduce, cuida la flora intestinal. Lo único malo es que no le inyectan mucho gas y el poco que tiene se disipa rápidamente después de abrir la botella.

Para mí, a la hora de gozar bebiendo gaseosas acá en donde vivo, Lima, Perú, no hay como una "Inca Kola" helada de 1.5 litros, más chocolates, guafer y cigarros.

Debería hacer un escrito muy extenso sobre gaseosas, de hecho puedo escribir todo un ensayo sobre gaseosas de América del Sur, ya que casi todas las he probado, siendo que hay una que es inolvidable y se la recuerda siempre, no sólo por su sabor sino por el motivo de que uno trae a la memoria a la "Postobón" colombiana relacionada con la amistad bella de su gente.

Ahora mismo y antes de dormir, voy a comprar una "Inca Kola" heladita de un litro y medio, luego para "resetear" me tomaré un vaso de leche con cocoa, caliente, como para cubrir los efectos en los intestinos, cosa de estrategia para la salud, nada más.

Me despido con el recuerdo de la gaseosa "Lulú" de mi barrio en COVIDA, con el recuerdo de la "Royal Crown Kola", de la arequipeña "Kola Escocesa", de la naranjada rica llamada "IQ", del agua jean "Canada Dry".

Hasta la próxima.

César Ignacio.